Una mañana de limpieza. Una visita inesperada. Un poco de cariño necesitado. Lágrimas. Besos. Un almuerzo con él. Unas sonrisas para acabar. Un abrazo. Ver un poco del torneo de COD. Un monólogo. Otro abrazo. Matemáticas. Mi amigo Nietzsche. Una charla sobre películas. MUCHO SABINA PARA ESTA TARDE. De cenar: pizza.
Más de cien palabras, más de cien motivos para no
cortarse de un tajo las venas, más de cien pupilas donde vernos vivos, más de
cien mentiras que valen la pena
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