martes, 15 de marzo de 2011

Si es que lo sabía, desde que abrí los ojos esta mañana y me di cuenta del día que era lo sabía. No fallaba iba a acabar llorando estaba claro pero lo que no me imaginaba era que iba a ser precisamente en ese momento. Pegar un portazo de la academia y dejar las lágrimas caer, tirar la mochila y olvidarlo todo. Ha pasado un hombre que se ha preocupado por mí, que me ha visto llorando y ha querido que me desahogara con él si lo necesitaba. Pero se reiría de mí si le cuento mis simples tonterías de adolescente. 
Es absurdo llorar por cosas que ya han pasado y que no tienen repercusión ninguna en mi vida diaria pero no puedo controlar mis sentimientos. Y mas absurdo aún es suplicar una disculpa, solo por escuchar su voz. No, no le echo de menos ya dije que lo que echo de menos es la forma en que me siento cuando estoy a su lado. Echo de menos la confianza en mi misma, la seguridad que me daba..

1 comentario: